Repilo del olivo

El Repilo es una de las enfermedades en hongos más comunes y más importantes en el olivar. El principal síntoma de la enfermedad son las manchas circulares de color marrón en las hojas, acompañados de una defoliación, lo que debilita el cultivo y perjudica la producción.

Pero primero veamos con más detenimiento qué es el Repilo.

El hongo que causa esta enfermedad se llama Cycloconium oleaginum. Los periodos más frecuentes de infección de la enfermedad son en primavera y en otoño, ya que las condiciones más favorables para su propagación son la humedad y las temperaturas entre 8 y 24 ºC.

El ciclo evolutivo del Repilo se divide en cuatro fases:

Germinación: el hongo germina sobre la hoja con la presencia de agua libre y unas temperaturas en torno a los 20 ºC.

Infección: las primeras infecciones coinciden con el periodo de lluvias del final del verano o principios de otoño, momento en el que se desarrolla inicialmente la enfermedad.

Esporulación: aparecen en el exterior de las hojas las conidias que propagarán la enfermedad. Este es el momento en el que aparecerán las manchas típicas en las hojas.

Diseminación: las conidias se dispersan principalmente por la lluvia, aunque también pueden transportarse con el viento. Por ello, las épocas de mayor propagación de la enfermedad tienen lugar en primavera y en otoño.

El hongo sobrevive en los periodos desfavorables (verano e invierno) en las hojas caídas o en las que se mantienen en el árbol, donde puede mantenerse latente durante varios meses.

La prevención es el mejor método de control en la lucha contra el repilo. En los meses posteriores a la cosecha, es fundamental realizar una poda selectiva para favorecer la aireación.

Además, en zonas que favorezca la aparición de la enfermedad (como en zonas montañosas, cerca de ríos, zonas proclives a tener rocío, etc.), es aconsejable las aplicaciones con productos a base de oxicloruro de cobre u óxido cuproso principalmente.

En los casos en los que la enfermedad ya está presente, Adler Agro recomienda acompañar los tratamientos fitosanitarios con Biactive.

Biactive es un bioestimulante a base de extracto de algas y microelementos especialmente formulado para ayudar a superar situaciones adversas como periodos con falta de agua, ataques de patógenos, etc. Además, se puede mezclar con otros productos fitosanitarios.