La fertilización durante la época de floración en agricultura
La floración es un periodo breve, dado que la mayoría de las flores se marchitan con gran rapidez. Sin embargo, es un proceso fundamental en la agricultura. Puesto que en él ocurren los procesos de polinización, fecundación, formación de las semillas y crecimiento inicial de los frutos, que definirán en gran medida la cantidad y calidad de la cosecha final.
La floración es indispensable, sobre todo, en ciertos cultivos como los frutales y hortícolas. Debido a que el principal valor comercial de estos cultivos se encuentra en el fruto.
Durante la floración normalmente suceden las etapas que se muestran a continuación:
– Posible alargamiento del pedúnculo floral
– Apertura de la corola seguida de aparición de los estambres y de los pistilos
– Dehiscencia de las anteras y dispersión del polen
– Receptividad de los pistilos con frecuente aparición de líquido estigmático
La época de floración depende principalmente de la especie, pudiendo desarrollarse más temprana o tardíamente según la variedad cultivada. Normalmente se lleva a cabo entre las estaciones de primavera y otoño. Siendo las plantas denominadas de día largo las que florecen entre primavera y principios de verano y las plantas de día corto las que florecen en otoño.
De esta manera, el proceso de floración se encuentra estrechamente relacionado con cuatro factores principalmente:
– La actividad hormonal
– Las condiciones ambientales (luz y temperatura)
– La disponibilidad de agua
– Una nutrición balanceada
Respecto a la nutrición, los cultivos en floración, ya sea en invernadero o al aire libre, necesitan mantener constante el nivel de Nitrógeno, y recibir Fósforo y Potasio, pero no en excesivas cantidades. Puesto que el exceso de nutrientes puede dar lugar a un desequilibrio nutricional, disminuyendo el efecto positivo.
Asimismo, es importante aportar micronutrientes como el Boro que participa en la polinización, la floración y la producción de semillas y que es de gran importancia para la regulación hormonal de las plantas. Así como el Molibdeno, cuya carencia en el cultivo produce una reducción del crecimiento de la planta y de la floración.
Además, este proceso requiere muchísima energía en su mayoría destinada a la producción de aminoácidos participantes en la reproducción.
En este sentido, ADLER AGRO ha desarrollado una solución nutritiva específica para esta delicada y transcendental fase del cultivo. FLOWER es un bioestimulante a base de aminoácidos y micronutrientes que mejora el estado nutricional de la planta, estimulando las funciones fisiológicas que tienen lugar en estos momentos del ciclo.
Su alto contenido en boro y molibdeno complejados asegura la correcta asimilación y disponibilidad para la planta de estos nutrientes. Aumentando así la viabilidad del polen, fertilidad de la flor y promoviendo el cuajado.
Asimismo, los aminoácidos presentes en el producto aumentan el poder germinativo del grano de polen y la elongación del tubo polínico.
La fórmula de ADLER AGRO garantiza un aumento de la floración y el cuajado, y con ello de la producción.